No busquemos reconocimiento y agradecimiento… hagamos lo que ha de hacerse. A su tiempo Dios nos agradecerá todo aquello que hacemos.
Muchas veces la gente que está en nuestro entorno no se da cuenta de lo mucho que hacemos por estar con ellas:
✿ Tengo una amiga que siempre está en problemas y no se da cuenta que está mal en su forma de actuar. Pese a todo, yo le sigo perdonando.
Es triste, pero parece que cada vez que tiene una ocasión de dar gracias, en lugar de hacerlo, siempre sale con una nueva crítica.
Sé que duele mucho, pero en la vida hay personas así, piensan que tienen la razón en todo y no dejan margen para el error.
✿ Si tenemos un amigo que está viviendo un mal amor, alguien que no le conviene, por todos los medios posibles tratamos de decirle que no está bien lo que hace, pero no hace caso porque no ve más allá de lo que está viviendo… pese a todo, seguimos a su lado pues sabemos que nos necesita.
✿ Cuando somos hijos y ayudamos a nuestros padres, nunca es suficiente: puedes darlo todo pero eso no te hace mejor a sus ojos. Puede que tengas a un hermano que no hace ningún esfuerzo en atender a tus padres, y pese a ello, tus padres parecen apreciarle más que a ti que estás siempre con ellos. Y eso ocurre en todos los ámbitos, no sabemos agradecer lo que se nos da sin condiciones.
✿ A veces tenemos amigos muy posesivos, quieren todo nuestro tiempo para sí mismos, y aunque se lo estés dando siempre te exigen más, y eso es mentalmente agotador, es muy desgastador.
Por eso siempre pienso que es bueno ayudar a las personas que nos necesitan, pero evitando abocarse a una sola, porque nos desgasta mucho y nunca será suficiente, ni para los amigos, padres, hermanos…
Dios en su infinito amor nos da la capacidad de entregar mucho amor sin esperar nada de nadie, pero eso no quita que sea algo que cansa y agota. Puede que sepas lo que es vivir con alguien así, nunca podremos llenar los sacos de estas personas, siempre estarán vacías porque son sacos sin fondo.
Lo único que queda es hacer el bien sin esperar nada a cambio, porque tu premio viene del cielo.
El amor de nuestro Señor, qué te bendecirá con un lindo hogar, con un buen amor, con buenos amigos… esa será la recompensa de nuestro sacrificio por tratar de satisfacer a todos lo que amamos, pero cuando ésta no está preparada es como sembrar en el desierto…
© Autor: Shoshan